El Toyota Winglet es un vehículo unipersonal similar al Segway que Toyota pretende sacar al mercado en 2010. Se han presentado tres versiones, S, M y L, con distintos pesos, tamaños y autonomías, como se puede ver en la tabla inferior.
Aunque Toyota se había distinguido de Segway gracias a su prototipo Toyota i-REAL Concept, en el que el pasajero iba sentado y con dos alturas distintas, inicialmente han apostado por un modelo similar al Segway, aunque con una versión en la que aparentemente no se utilizan las manos.
Conserva alguna de las características del prototipo, como la capacidad para girar sobre sí mismo. En todos los modelos la velocidad máxima es de 6 km/h, notablemente inferior a los 20 km/h del Segway.
La clave del triunfo del Toyota Winglet será superar las barreras con las que el Segway no pudo: su precio (un Segway cuesta sobre 5.000 euros) y la adopción social, que no acaba de cuajar, probablemente por las pocas unidades que vemos.
En este sentido, que lo haga Toyota, unos cuantos años más tarde, en tres versiones y con una velocidad máxima baja, puede ayudar a un precio reducido (pongamos 1.000 euros). Si más gente empieza a comprarlo, será habitual verlo por las calles, y puede ser una buena alternativa al coche en desplazamientos urbanos.
Son especialmente interesantes los dos modelos en los que no se utilizan las manos, con 5 y 10 kilómetros de autonomía. Me parece una acierto que la velocidad máxima sea la misma en todos, para no enfrentarse a la disyuntiva de elegir entre pequeño y lento o grande y rápido.
La barra más baja que queda entre nuestras piernas me parece más segura que la barra alta. El motivo es que, en caso de caída, en el Segway el mayor problema es tropezar con la barra (y además es más alto). En los Toyota Winglet sin barra alta, en caso de “accidente” sólo tendríamos que pegar un salto a la acera, a 6 km/h no supondría mucho problema si somos algo ágiles (al menos aparentemente). La seguridad, la naturalidad de movimientos y la confianza son importantes en este tipo de dispositivos.
Además de su precio, faltan algunos detalles por resolver: por ejemplo si lleva el enchufe incorporado. Su tiempo de carga es de una hora, por tanto se podría ir a trabajar en él si vivimos a 10 km, gastaríamos 0 gasolina y la mitad de la electricidad la pagaría nuestro jefe.
